La historia de mi renacer: Resignificar la intersexualidad | Katia Marlene Is

La historia de mi renacer: Resignificar la intersexualidad

Por Katia Marlene Is

Esta historia fue compartida exclusivamente con Brújula Intersexual, si quieres publicarla en otro lugar, por favor escríbenos para pedir autorización a la autora: brujulaintersexual@gmail.com

Imagen: Laura Inter, 2020. Esta imagen fue elegida de acuerdo a las especificaciones de Katia. Descripción de imagen: La imagen muestra un amanecer a la orilla del mar.

Esta es la segunda parte de mi historia de vida, la primera parte la pueden encontrar en el siguiente enlace, les recomiendo leerla antes de continuar: Brújula: De la oscuridad a la luz. Entre la discapacidad visual y la intersexualidad.

Antes de comenzar, con infinito cariño quiero agradecer a Brújula intersexual y a mis grandes amigas Laura Inter y Mar Is, al igual que a todas y cada una de las personas intersexuales que forman parte de este precioso grupo y que ahora son mis amistades, les envío un infinito abrazo de luz y amor. Me siento agradecida de poder compartir esto con ustedes, y lo hago con la finalidad de ayudar a muchas más personas a encontrar paz y tranquilidad para tener una mejor calidad de vida y superar la adversidad. También deseo que mi experiencia de vida contribuya para lograr que en nuestra sociedad ninguna persona sea discriminada ni excluida, y que exista respeto y protección de sus derechos humanos.

Hubo un tiempo en el que me sentía desorientada, intranquila, con una gran carga emocional y con un intenso nerviosismo, no sabía como canalizar mis emociones, quería expresar lo que había vivido, contar mi historia para que fuera de ayuda a otras personas, pero no sabía como empezar.

El compartir la primera parte de mi historia fue un proceso difícil, tuve que ir recordando experiencias muy dolorosas, pero cuando lo hice me sentí más tranquila y liberada de un gran peso que me asfixiaba.

En Brújula me compartieron herramientas para el manejo de mis emociones y pensamientos, como la meditación, la contención emocional y las muestras de cariño que tanto me hacían falta, y esto me proporciona una mayor certeza en mi caminar por el trayecto de esta vida, una gran paz y serenidad.

 

AQUÍ Y AHORA: EL LABERINTO DE MI MENTE Y RECUERDOS

Aunque ya recordé y compartí muchas de las experiencias que he vivido, me resulta de vital importancia continuar la exhaustiva exploración del inmenso laberinto que ha sido mi mente. En este texto compartiré algunas de mis experiencias e ideas que este tiempo he recordado o reflexionado. Comparto esto afectuosamente con ustedes con el objetivo de completar mi proceso de sanación y resignificar de mi vida como mujer disca*  e intersexual, y deseo que también sea de ayuda para mi amada familia intersexual.

*Disca = persona con discapacidad

Para mí, primero fue necesario recordar y expresar detalladamente todas mis experiencias pasadas, esto porque no podemos sanar lo que no recordamos, entonces es preciso primero recuperar esas experiencias, para poder luego sanar y superarlas.

Después de haber llegado a Brújula Intersexual, comenzar a leer otras historias e información de personas como yo, y asistir a conferencias y eventos donde conocí y escuché a las personas de esas historias, mi vida se iluminó en su totalidad, pero al mismo tiempo comenzó a sobrevenir desde mi pasado, una inmensa cascada de recuerdos de sucesos y episodios trágicos impregnados de dolor y sufrimiento. Sucesos que marcaron mi existencia permanentemente, y que me había propuesto confinar en el limbo del olvido por el irremediable daño que me produjeron, tanto a mi salud corporal como a la psicológica y social.

Me había empeñado, como si de un juicio se tratase, a la enfurecida tarea de dar sentencia de cadena perpetua a todos y cada uno de esos tormentosos hechos que viví, designándoles como monstruos y como una representación del peor de los males que pueden perjudicar la vida de una persona, hasta hacerla sentir que ha sido aniquilada por completo.

Hubo muchas recuerdos de mi vida que no mencioné en la primera parte de mi historia. Algo que considero de suma importancia y que olvidé mencionar, es que antes de conocer el término “intersexual”, por muchos años destiné gran parte de mi tiempo a permanecer sumergida en diferentes programas que encontraba en radio y televisión, en los que hablaban de desarrollo humano, sexualidad y superación personal en gran variedad de áreas de la vida. En ellos aprendí muchas cosas que fueron de gran importancia para mi vida durante ese largo recorrido. Vivía hipnotizada escuchando a científicos, investigadores, médicos, psicólogos y terapeutas hablando de diversidad de temas, así como documentales de ciencia y medicina.

También realizaba llamadas telefónicas a líneas de ayuda como DIVERSITEL y la línea de atención del Instituto Nacional de Mujeres, y hasta llegué a asistir a múltiples talleres organizados por AVE de México, por invitación de mi querida amiga Maribel Ortega, Licenciada en Psicología y gran conferencista, a quien admiro y estimo profundamente. En estas conferencias impartían talleres de temas de sexualidad, en los que comúnmente participan muchas personas expertas en la materia de sexualidad y prevención de enfermedades de transmisión sexual y desarrollo humano.

También asistía a grupos presenciales de lesbianas, en los que diversos especialistas impartían contenidos de gran cantidad de temas. Tenía una inmensa necesidad de encontrar medios que me ayudaran a entender y sanar mi propia experiencia, así que movía cielo, mar y tierra para sumergirme en toda clase de programas y conferencias. También me impulsaba la multitud de preguntas sin respuesta que día y noche daban vueltas en mi mente, sobre todo preguntas relacionadas a las complejas y dolorosas experiencias que viví en la Unidad Metabólica Infantil del Hospital de Ciencias Médicas y Nutrición, donde modificaron irremediablemente mi cuerpo con innecesarias cirugías genitales, que solo me causaron dolor y un mar de dudas. Necesitaba respuestas con la sed y el hambre de un náufrago desesperado por salir del lugar donde se encuentra. Me sentía desesperada y buscaba encontrar una posibilidad de salvación. Lo más triste de todo es que por más que intentaba encontrar respuestas, estas jamás llegaban, me sentía atrapada en medio de un gran océano, aferrada en intentar alcanzar tierra firme, pero por más que intentaba, sentía que me alejaba cada vez más de la orilla.

Tenía la esperanza y el profundo deseo de que pronto aparecería mi tabla de salvación, una persona lo suficientemente experta en el tema de la intersexualidad que por fin me ayudaría a conocer con claridad mi realidad. Ansiaba la posibilidad de encontrar la luz que tanto había estado esperando, y que afortunadamente ahora tengo en Brújula.

Existen graves consecuencias que dejaron en mi cuerpo las múltiples intervenciones quirúrgicas a las que me sometieron, que hasta la fecha me siguen causando problemas de salud, como: dolor e irritación al orinar, la necesidad de utilizar toallas femeninas todos los días para contener el excedente de orina que se queda atrapada entre los pliegues de la piel cercana a la uretra que me dejaron con tantas cirugías… mis vías urinarias han quedado irreversiblemente dañadas. Otro de los grandes problemas que padezco, es la recurrente e incapacitante úlcera venosa en la zona de mi pierna izquierda, donde cortaron un enorme trozo de tejido vascularizado que utilizaron para intentar construir un pene que yo nunca quise, ni solicité, ni necesitaba, todo esto lo menciono en la primera parte de mi historia. Todas estas marcas y cicatrices en diferentes partes de mi cuerpo, dañaron seriamente mi autoestima. Las cirugías me causaron constantes pesadillas que me persiguen hasta la actualidad, relacionadas a mis experiencias en los quirófanos y hospitales. Así, podría detallar cada uno de los aspectos negativos que perjudicaron seriamente mi vida en tantas áreas de mi existencia, y me duele profundamente que tantas otras personas intersexuales, también hayan sido víctimas de esta clase de inhumanos procedimientos quirúrgicos sin nuestro consentimiento.

 

BUSCANDO EL AMOR

Durante los primeros 30 años de mi existencia, jamás viví la experiencia de una relación de pareja, esas experiencias solo las vivía en mi imaginación. Cada experiencia en el hospital me alejaba más de la posibilidad de relacionarme con las personas, además de la dificultad de encontrar las palabras para poder explicar adecuadamente todo lo que había vivido y la razón de mis cicatrices, a la chica que me permitiera ser su pareja y compartir esa preciosa vivencia.

Me siento emocionada de comentarles que la vida me regaló la posibilidad, después de todo, de vivir la experiencia de tener una relación de pareja en 4 ocasiones, entre 2012 y 2018, con chicas de diferentes edades que significaron, cada una y en su momento, un intenso rayo de sol para mí. A quienes pude platicarles un poquito de mi situación, tal vez no contaba con la información que ahora tengo, pero les platiqué de todo esto de la mejor forma que pude. Primero tuve una relación a distancia con una hermosa chica dominicana llamada Evelin, las siguientes personas en épocas distintas, hasta el 2018 en que terminó la relación más reciente.

Tristemente solo se trató de relaciones de corta duración, debido a que ninguna de ellas compartió conmigo el deseo de casarse o tener una relación estable y permanente. Sin embargo, las recuerdo con gran cariño, y le deseo lo mejor a cada una de ellas.

Aún así, no pierdo la esperanza de conocer en un futuro a una chica inter que comparta conmigo el mismo deseo de establecer juntas una relación plena de amor recíproco, comprensión y cariño, y de vivencias felices, ya que ese es uno de los sueños más grandes en mi vida.

 

CONCLUSIÓN

Se que todo es posible, seguiré recorriendo el laberinto de mi mente y con el tiempo podré sanar completamente. Si bien existen personas llenas de maldad como los médicos que me realizaron todas esas dolorosas cirugías sin importarles mi opinión, también existimos personas llenas de amor y de lindos sentimientos para compartir en completa reciprocidad, para contribuir a que este mundo sea un hogar lleno de bienestar, paz y tranquilidad. Las personas intersexuales merecemos amar y ser amadas, merecemos ser felices.

Infinitas gracias por permitirme compartir con ustedes estos nuevos fragmentos de mi historia de vida, de renacer, de resignificar, de mi travesía de la oscuridad a la luz.

  • Katia Marlene IS

NAMASTE, FELIZ VIDA, ABRAZOS DE INFINITA LUZ A MI AMADA FAMILIA INTERSEXUAL POR SIEMPRE.

 

 

Un comentario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.