“Soy María… sucede que me gustan las chicas. Sucede que soy Intersexual.”

Por María Tridas

Traducción: Laura Inter de la historia ““I’m Maria… I Happen To Like Girls. I Happen To Be Intersex.” de María Tridas

Fuente: http://imfromdriftwood.com/maria_tridas/

La fuente para la historia de hoy es interACT, una organización sin fines de lucro que usa estrategias legales innovadoras y otras estrategias, para abogar por los derechos humanos de lxs ninxs que nacen con características intersexuales.

Mi nombre es María Tridas, y soy de San Petersburgo, Florida. Cuando tenía 12 años de edad, comencé a tomar una terapia de reemplazo hormonal, mis padres simplemente me dijeron que era porque no me había desarrollado como las otras chicas. Así que cuando las otras chicas estaban comenzando con sus periodos menstruales, y realmente comenzaban a crecer y desarrollarse en lo que significa ser una mujer, yo, de hecho, tenía estas píldoras que tenía que tomar todos los días, y esa fue la manera en la que fui creada, no hay nada malo con eso, pero así era.

Seis años después, estaba en el mismo consultorio médico que había visitado cada mes mientras crecía. Excepto que esta vez se sentía como si fuera una situación un poco más seria. Mis padres estaban ahí, estábamos en el consultorio médico sentados. Sabía que algo era diferente esta vez, y la doctora simplemente me dijo que tengo cromosomas XY, y comenzó a revelarme todos estos pequeños pedazos y piezas de información, aunque ahora no recuerdo exactamente qué fue lo que me dijo. Pero dijo algo que después descubriría – algo que después descubriría que significa que era soy intersex. La doctora me dijo que había nacido con síndrome de insensibilidad a los andrógenos completo.

Así que después de descubrir que tenía cromosomas XY, y con poco o nada de conocimientos acerca de cómo hablar de lo que sucedía con mi cuerpo, fui a la universidad y decidí que iba a ser la mejor chica que pudiera. Y que, para mí, eso significaba unirme a una hermandad de mujeres. Pensaba que si me unía a una hermandad, pasaba el tiempo con un grupo de mujeres, y lograba ser la chica más femenina que pudiera, ya sabes, la ropa, el cabello… entonces el caparazón externo de la María femenina, hundiría a la María intersex con cromosomas XY.

Pero también me di cuenta que me gustan las mujeres, y así mi travesía en la universidad comenzó como esta ultra-femenina y heterosexual mujer, que terminó por “salir del closet”, y convertirse en una orgullosa lesbiana, y terminé comenzando mi travesía al mundo queer. Definitivamente usaba el ser lesbiana como una especie de distracción, porque tuve que “salir del closet” y realmente aceptar que era gay, y hacer que todas las personas en mi vida se pusieran al día sobre quién era yo como lesbiana. Pero todo eso cambió cuando conocí a una chica en el postgrado y la relación comenzó a hacerse seria.

Sabía que eventualmente tendría que decírselo, y las lesbianas hablan de todo, así que la pregunta del porqué no menstruaba llegó rápidamente. Así que con los fragmentos de información que le di, ella fue capaz de armar su propia búsqueda en Google. Así que tenía preguntas legítimas sobre lo que había leído en internet. En ese momento supe que, no solo necesitaba darle algunas respuestas, sino que la manera en que necesitaba hacerlo era aprendiendo acerca de mí misma, enfrentarme a eso, y simplemente aprender – y finalmente aprovechar ese momento y realmente aprender sobre quien soy.

Mis padres y yo nos sentamos en la mesa de la cocina. Sentí como si estuviera haciendo la tarea de la escuela secundaria. Tenía una hoja de papel y un lápiz, y escribí la definición de intersex, y básicamente hice un diagrama de flujo de lo que sucede cuando se concibe un bebé, cómo se desarrolla el bebé, que sucede cuando procesas ciertas hormonas que tu cuerpo produce, o cuando no procesas ciertas hormonas, como se crea un cuerpo. Así que, de alguna manera, tuve mi primera clase de biología sobre mi misma y, como si fuera una prueba para la que tenía que estudiar. Entonces subí a mi auto y manejé dirigiéndome a la casa de mi pareja, vivíamos a media hora de distancia, durante todo el camino pensé en lo que iba a decirle.

Me estacioné fuera de su casa y salí de mi auto. Ella ya me estaba esperando, y simplemente fuimos a dar un largo paseo. Afortunadamente, la conversación fue mucho mejor de lo que había imaginado. Por más nerviosa que estaba, no era necesariamente porque ella supiera esto, sino porque quería que fuéramos capaces de seguir adelante. Era tranquilizadora la manera en que tomo la situación. No le importó realmente, y eso impulsó mi confianza para querer aprender más acerca de esto.

Al estar con ella, aunque las cosas no siempre estaban muy bien, lo mejor que hizo por mí fue ayudarme a comenzar mi camino para llegar a ser una mujer intersexual con confianza en mí misma. Ahora hablo de eso todo el tiempo.

No es que diga: “Hola, soy María, soy intersexual”, es algo más como: “Hola, soy María. Oh sí, sucede que me gustan las chicas. Sucede que soy intersexual. Sucede que soy latina. Sucede que como pizza”.

Una vez que te informas acerca de lo que significa ser intersexual, te das cuenta que esto se relaciona con una imagen más amplia del mundo, y que todo es tan diverso, y que los humanos son diversos, el género es diverso, todo está dentro de un espectro de posibilidades. Cuando te proporcionas a ti mismo el conocimiento sobre quién eres en tu núcleo, esto te permite construir tu capa exterior, esa persona que tú estás presentando al mundo en la forma más hermosa, honesta y segura.