La Batalla entre los Deportes Profesionales y la Comunidad Intersexual. Por Wendy Syfret (participa Morgan Carpenter de OII Australia)

La Batalla entre los Deportes Profesionales y la Comunidad Intersexual

Por Wendy Syfret (con la participación del activista intersex Morgan Carpenter de OII Australia)

Fecha de publicación: 28 de abril de 2015

Traducción de Laura Inter del artículo The Battle Between Professional Sports and the Intersex Community” de Wendy Syfret de VICE.COM (si encuentran errores en la traducción me avisan)

Fuente: http://www.vice.com/en_au/read/the-battle-between-professional-sports-and-the-intersex-community?utm_source=vicefbanz

  deporte

El abuso de testosterona de los atletas profesionales ha sido, durante mucho tiempo, un foco de atención en la legislación anti-dopaje en el deporte. Sabemos que un deportista que toma testosterona sintética, será capaz de aumentar su masa muscular más rápidamente que si no la tomara, y este efecto es más notorio en una mujer. Pero, ¿que sucede si una mujer produce naturalmente testosterona a un ritmo considerado superior al normal? ¿Debería ser tratada como si tuviera una injusta ventaja, como si fuera una atleta que esta tomando drogas para mejorar su rendimiento?

Esta pregunta fue hecha este año, después de que la estrella india, la atleta Dutee Chand, viera amenazada su carrera, cuando un examen hormonal reveló que tenía elevados niveles de testosterona. A pesar de que se identifica física y emocionalmente como mujer, su condición (hiperandrogenimo, que significa que tiene niveles excesivos de andrógenos en su cuerpo) la ponen en el rango de los hombres, a los ojos del órgano de gobierno de su deporte.

La historia de Dutee, levantó un debate que sigue en curso, sobre las percepciones físicas y psicológicas del género en el deporte. Esto también planteo una moderna y difícil pregunta: ¿Dónde deberían ser trazadas las líneas, con el objetivo de equilibrar la inclusividad y la competencia justa, en un mundo menos binario?

En ningún otro lugar esta tan claramente definida la brecha que divide a lo masculino y a lo femenino, como lo está en el deporte profesional. Aquí, nuestra comprensión del género esta en su forma mas simplista. Aunque muchos argumentan que es la cultura, no la naturaleza, la que pone a las personas en géneros asignados, el deporte está totalmente construido en comprensión dimórfica del sexo.

Para contar con algunos antecedentes, diremos que las variaciones intersexuales pueden poseerlas tanto hombres como mujeres, pero solo es considera un problema en el deporte lo relacionado a las atletas femeninas. Hay dos Diferencias del Desarrollo Sexual (DDS) que pueden tener un impacto. La primera es el Síndrome de Insensibilidad a los Andrógenos (SIA). Las personas que nacen con este síndrome, generalmente parecen ser mujeres tradicionales, pero tienen una mutación que impide que la testosterona sea absorbida por el cuerpo. Debido a esto, cualquier ventaja atlética que pudieran tener sería muy pequeña.

La segunda es Deficiencia de 5 Alfa Reductasa (5 – DAR), estos individuos tienen una mutación que impide la creación de dihidrotestosterona – una hormona que desencadena la formación de genitales masculinos. Debido a esto, a menudo los niñxs son asignados con el género femenino. Pero, a diferencia de los individuos con SIA, ellxs si pueden absorber la testosterona en su sistema y, como resultado, se vuelven más masculinos durante la pubertad. Debido a este cambio en la masa muscular y en el desarrollo, así que podría decirse que pueden tener una ventaja atlética.

En la historia el deporte profesional, las pruebas hormonales se han aprobado y desaprobado varias veces. Actualmente, la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo y el Comité Olímpico Internacional, miden la testosterona funcional para decidir si una atleta es capaz de competir como mujer.

Si los niveles de testosterona en una mujer son demasiado altos, le dan la opción de bajarlos a través de una cirugía o con medicamentos, a fin de continuar compitiendo. Sin embargo, las intervenciones médicas son sumamente controversiales para la comunidad intersexual. Muchos argumentan que no se ha comprobado la ventaja que, perciben, da la testosterona, además de que el proceso de reducción de la hormona (de manera quirúrgica o con medicamentos), afectaría injustamente la capacidad de una atleta de entrenar y competir.

El activista intersexual y presidente de la Organización Internacional Intersexual de Australia, Morgan Carpenter, desaprueba totalmente la ventaja percibida de las mujeres con variaciones intersexuales. “Muéstranos a las mujeres que están ganando de una manera dramática,” dijo a VICE. “Ves a Caster Semenya [controvertida atleta Sudafricana] y a una serie de otros atletas en los últimos años, y no podemos decir que tienen una ventaja injusta. Quiero decir, ¿ganan todo el tiempo? ¿Ganan por un amplio margen?

Morgan, al contrario, siente que el sistema de eliminación de mujeres de competiciones, basándose en sus niveles de testosterona, es producto del miedo y de una falta de entendimiento. “No hemos podido observar que las atletas intersexuales tengan una clara y visible ventaja sobre otras mujeres atletas,” dijo. “Esos datos no existen.”

Pero el miedo, aunque irracional, es comprensible. Como se mencionó, la testosterona ha sido usada por los atletas, de cualquier género, como un agente de dopaje. Sin embargo, hay una ruptura entre los efectos de la testosterona artificial contra la testosterona natural. El consumo de testosterona artificial por una atleta femenina, sin variaciones intersexuales, podría resultar en que fuera capaz de desarrollar masa muscular más rápido de lo usual. Pero cuando el exceso de esta hormona, ocurre de manera natural en el cuerpo de una mujer con variaciones intersexuales, ella no puede hacer uso de la testosterona de la misma manera.

La endocrinóloga, la Dra. Sonia Davison, explicó a VICE, que el papel de las hormonas en el cuerpo es turbio, y es difícil realizar una declaración definitiva al respecto. Pero señaló que las situaciones donde las mujeres tienen niveles altos de testosterona debido al síndrome de ovario poliquístico, están lejos de ser una ventaja competitiva.

“Tienden a tener dificultades con el exceso de peso y sería poco probable que tuvieran un mejor desempeño en actividades físicas,” dijo. De hecho, como señaló la Dra. Davison, los efectos físicos más frecuentes son un “incremento en el riesgo de desarrollar desórdenes metabólicos tales como diabetes tipo dos, y también enfermedades cardiovasculares”. Ninguno de los cuales tendría un impacto positivo en el rendimiento atlético.

En Australia, se han tomado algunas medidas para gestionar la inclusión de las atletas intersexuales. La Enmienda sobre Discriminación Sexual de 2013 (Orientación sexual, Identidad de Género y el Estado Intersexual), la Ley declaró que las exenciones deportivas, no serán aplicadas a todos los casos con la misma regla, sino que se incluirá una evaluación de cada caso. Aunque, la Organización Internacional Intersexual, argumentó que la legislación anti-discriminación no va lo suficientemente lejos, e instó a que todas las exenciones deportivas, que pudieran eliminar a atletas intersexuales de la competición, fueran removidas.

En su artículo “In the Halfway House of III Repute: Gender Verification under a Different Name, Still No Contribution to Fair Play”, Maren Behrensen de la Universidad de Linköping, apoya este razonamiento y lo lleva un paso adelante. Sugiere que las atletas con variaciones intersexuales deberían estar “en libertad de explotar sus rasgos intersexuales”. Al principio esto parece desafiante, en contradicción con la naturaleza de la competencia justa, pero comparó la ventaja hormonal, como los niveles altos de testosterona, con la ventaja física que da el haber nacido alto o con hombros anchos.

Es una opinión compartida por la Dra. Davison, quien afirmó que cualquier ventaja real en el rendimiento está relacionada al “físico, masa muscular, habilidad natural, entrenamiento y experiencia.”

Este pensamiento nos lleva a la pregunta más amplia: ¿Es justa cualquier clase de segregación por género en los deportes? Maren sugiere que la respuesta pudiera ser que, el sistema de clasificación, pudiera estar comprometido a que se “rastreara la predisposición genética en lugar del género.”

Tristemente, muchos atletas han sido excluidos y removidos de la competencia, antes de convertirse en profesionales. En Australia, aunque algunos miembros de la comunidad intersexual trabajan dentro del deporte y participan en un nivel escolar, Morgan dijo a VICE, “ a ninguna de ellas se les dará la oportunidad de competir profesionalmente”.

Señala que los problemas para las atletas intersexuales en los deportes, comienzan antes de que siquiera lleguen a necesitar una prueba genética – y el primer problema es básicamente la inclusividad. El proceso de las intervenciones, hormonales y físicas, no-voluntarias en niñxs intersexuales, a dejado a muchos adultos con cicatrices físicas, y preocupados como para participar en cualquier actividad donde su cuerpo esté en exhibición y abierto al escrutinio.

2 comentarios

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.