La historia de mi hermana Socorrito

Por Remedios

Tengo 11 hermanos, actualmente solo 8 seguimos vivos. Mi madre habla mucho de su segunda hija, Socorrito, que falleció cuando solo tenía 3 años de edad. Aún se le salen las lágrimas cuando la recuerda.

Mi madre casi no hablaba de mi infancia y yo nunca le preguntaba sobre eso. Ahora que conozco más sobre mí, hay ocasiones en las que he hablado con ella sobre la variación que tengo: Hiperplasia Suprarrenal Congénita (HSC). A partir de estas conversaciones ha tenido la confianza de contarme más sobre mi infancia y sobre Socorrito, mi hermana. Me dijo que era una niña alegre, que era de complexión muy delgada y que cuando jugaba con su hermana mayor se cansaba fácilmente. Constantemente se deshidrataba, se ponía mal de salud, pero cuando la llevaba al hospital, los doctores no sabían que tenía. Hace poco mi madre me dijo: “tu hermana nació como tú, con su ‘partecita’ distinta” (se refiere a que nació con un clítoris más grande de lo usual), luego me contó que un día mi hermana enfermó gravemente, dijo que le dio vómito y diarrea, que parecía estar enferma del estómago, la llevó al hospital, pero los medicamentos que le dieron no le ayudaron y Socorrito murió. Sé que mi madre hizo todo lo que estaba en sus manos, al igual que con cada uno de mis hermanos.

Escucharla me destrozó, aunque no pude llorar en ese momento. Todo me quedó claro, ahora sabía por qué mi hermana había fallecido… me di cuenta que, al igual que yo, Socorrito había nacido con HSC. Solo que yo, a diferencia de ella, no perdía sal y por eso no me afectó en mi salud. Cuando hay pérdida de sal, la persona debe ser atendida a tiempo o puede deshidratarse rápidamente y su vida puede estar en riesgo, pero los doctores nunca supieron que tenía, no le dieron la atención y medicamento que necesitaba.

En ese momento, decidí enseñarle a mi madre el libro de Brújula Intersexual donde está mi historia. Al leerla, me dijo que estaba orgullosa de mí.

Quise escribir este breve texto sobre mi hermana porque siento que ella forma parte de todas esas personas que en algún momento buscamos esa Brújula al no entender que pasa con nuestros cuerpos, solo que ella no tuvo la oportunidad que yo sí tuve.

Me siento muy afortunada al poder hablar sobre mi hermana, a quien no tuve la oportunidad de conocer, pero a quien, de todas formas, le tengo mucho cariño.

Remedios