Los cirujanos americanos continúan mutilando niñxs que no tienen una apariencia «normal»

Por Sean Saifa Wall

Traducción al español de Mara Cristina Toledo Silva del artículo “American surgeons are still mutilating children who don´t look ‘normal’“ de Sean Saifa Wall.

Fuente: http://qz.com/391209/american-surgeons-are-still-mutilating-children-who-dont-look-normal/

Me Inyecto 200ml de testosterona en mi muslo, sin saber sus efectos y rezando por un milagro, lamento que hayan removido de mi cuerpo mis saludables testículos cuando tenía 13 años. Internos o externos, ellos [mis testículos] habrían garantizado un curso normal de la pubertad masculina, en lugar de la pubertad femenina artificial que me fue impuesta por un doctor.

Reflexiono sobre las historias de otros que también han experimentado graves transgresiones contra sus cuerpos intersexuales. Pienso con qué frecuencia y valentía han contado sus historias. Y me siento con rabia al saber que muchos médicos, que han realizado reducciones de clítoris a niñas intersexuales y después prueban su sensibilidad con vibradores*, siguen siendo autoridades reconocidas en la urología pediátrica.

*enlace: http://www.thestranger.com/images/blogimages/2010/06/16/1276740688-yang_felsen_poppas_2007.pdf

Por décadas, los médicos no nos han escuchado. Muchos cirujanos y especialistas no hacen un seguimiento sobre el impacto emocional y físico que tienen las cirugías irreversibles en personas intersexuales como yo. Algunos sienten, que los cirujanos, tienen la responsabilidad de mutilar los cuerpos de los niñxs, a fin de sostener las nociones anticuadas de sexo y género, preservando, preservando un estricto binarismo [sexual] hombre/mujer.

Pero la variación en la anatomía sexual es algo que ocurre al menos en uno de cada 1500 nacidos vivos. Esto nos debería mostrar lo maravillosa que es la diversidad natural. Debería recordarnos que la anatomía sexual no es fija, sino fluida. Actualmente la cirugía para “corregir” a la anatomía de las personas intersexuales sigue ocurriendo, aun siendo cosmética y médicamente innecesaria.

Como activista intersexual, estoy contribuyendo a que las personas entiendan los problemas de los intersexuales y hacer presión para cambiarlos. Aquellos de nosotros que estamos dispuestos a contar nuestras experiencias del trauma médico, estamos compartiendo una conversación íntima con el mundo, en donde expresamos que a pesar de la opresión física que los cirujanos han ejercido sobre nuestra complejidad, nosotros seguimos aquí.

Pero algunas veces se siente como debatir éticamente con carniceros.

Muchos en la profesión médica ven a cirugía como su obligación. La mayoría continúa Ignorando lo que los defensores intersexuales dicen acerca del impacto de las cirugías. Poco ha cambiado la forman de tratar a los niñxs intersexuales desde que yo tenía 13 años.

El activismo intersexual no es fácil porque nuestros cuerpos son sitios de resistencia. No podemos ir a casa y desconectarnos de esta cuestión después de discutir sobre ello; vivimos y respiramos las complejidades de la intersexualidad todos los días. Pero nuestro activismo continua, alimentado por el coraje y el amor; un enojo por lo que se nos hizo sin nuestro consentimiento, y amor por lo que queda de nuestros cuerpos y por el bien de una futura generación de jóvenes que necesitan ser protegidos de tales violaciones.

El primero de abril, la pequeña nación Mediterránea de Malta se convirtió en la primera del mundo en garantizar la protección de los niñxs intersexuales: además de eliminar las barreras sociales y médicas de la gente transgénero, el paso hacia su nueva Identidad de Género, expresión de género y características sexuales, la ley ha prohibido cirugías genitales en bebés intersexuales.

El gobierno de Malta nos escuchó.

Dos años antes, El Foro Internacional Intersexual se celebró en Malta, patrocinado por la Asociación Internacional Gay y Lesbiana. Durante tres días, en diciembre del 2013, cerca de 20 activistas y yo discutimos sobre el futuro de nuestro movimiento. Tal vez lo más importante fue que nos consiguieron un encuentro con la Dra. Helena Dalli, Ministro para el Diálogo social, Asuntos del Consumidor y Libertades Civiles.

Describimos todo, desde el confinamiento en solitario para los reclusos intersexuales, pasando por la negación de la adopción, hasta el infanticidio. Hoy, mi mente vuela al saber que nuestra narración contribuyó a dar forma a la legislación nacional de Malta.

Una escucha profunda puede transformar y sanar. Puede conducir a la acción. Y me pregunto cómo podrían cambiar más personas e instituciones para mejorar, ¿si tan solo quienes ha tenido el poder, y causan daño, escucharan mejor? y ¿cómo podría ser diferente nuestro mundo, si ellos hicieran la paz o proporcionaran una reparación integral del daño por sus errores cometidos en el pasado?

Estoy pidiendo al resto de las naciones del mundo, a los pediatras, urólogos, y endocrinólogos, que permitan a los niñxs intersexuales crecer intactxs. Algún día, ellos podrán determinar por ellos mismos si sus cuerpos se alinean con su género. Este es el derecho inalienable de la integridad física y de la libertad con que todas las personas nacen, y no se debería de negar.