Voces de refugio | Por Yela (Venezuela)

Esta historia fue compartida exclusivamente con Brújula Intersexual, si quieres publicarla en otro lugar, por favor escríbenos para pedir autorización a la autora: brujulaintersexual@gmail.com

En este enlace puedes encontrar otras publicaciones de Yela: https://brujulaintersexual.org/?s=Yela 

Descripción de imagen: Imagen en acuarela de un par de manos sosteniendo un delicado arreglo de orquídeas moradas y amarillas. Las orquídeas, vibrantes y detalladas, están dispuestas de forma que parecen emerger directamente de las manos, las cuales están posicionadas para resaltar tanto la belleza de las flores como el gesto de cuidado y protección.

Voces de Refugio

Por Yela (Venezuela)

Cuando nacemos con alguna variación intersexual y crecemos sin ningún tipo de información ni acompañamiento, la vida se torna muy hostil. En mi caso, viví muchos años en la incertidumbre, en la oscuridad, sin entender qué pasaba, sintiéndome anormal. Sentía que no pertenecía a ningún lugar; me hicieron pensar que era un error y, muchas veces, quise irme de este mundo porque me sentía ajena a todo.

Sin embargo, hoy no quiero escribir acerca de cosas tristes; al contrario, quiero recalcar la importancia del acompañamiento, de extender esa mano amiga a nuestra comunidad. Hablar de nuestras historias en muchas ocasiones es un bálsamo para nuestras heridas. Eso sentí cuando conocí a Brújula Intersexual y pude leer cada historia ahí publicada; sentí que por fin pertenecía a algún lugar.

Quiero dar las gracias a cada persona que escribe aquí; gracias a ustedes entendí tantas cosas que pensé que nunca tendrían explicación. Desde ese día, todo cambió y comencé a trabajar en mí, en mi autoconocimiento, en reconocer mi cuerpo, mi esencia, mi valor. No es fácil, es algo que lleva años y puedo decir que aún me falta mucho, pero ya no estoy sola. Ya tengo la información que necesito para continuar.

He hecho hermosas amistades en este espacio, que hoy forman parte de mi familia y que, así como están para mí, yo siempre estaré para ustedes. Nunca más estaremos solas (os); somos parte de este mundo y tenemos derecho a vivir libres, a amar, a ser felices y a ser respetados. Cuando aprendes a amarte, tu mundo experimenta un cambio positivo muy grande.

Hoy quiero abrazarlos y besar cada una de sus heridas, porque entiendo lo mucho que hemos sufrido, pero también sé lo fuertes que podemos ser. Gracias, Brújula, por darme este hermoso regalo, estas ganas de luchar y la oportunidad de llegar a otras personas a través de mi historia de vida.

Con amor, Yela.

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.